ROSA GALLEMI BALAGUE - ANTONIO PUIG - JOSEP MARIA PUIG PLANAS - XAVIER PUIG ALSINA - MARC PUIG GUASCH - MANUEL PUIG ROCHA - FLAMAGAS/FLAMASATS SA, 19ª ENTREGA
FALLECIMIENTO DE MI TIO FRANCESC CASTELLO CARRERAS
Mi tío Francesc Castelló, yo y mi esposo Josep Escribano
Años más tarde de la muerte de mi tía Elisa Balagué Sans, falleció mi tío Francesc Castelló Carreras en Barcelona el día 26 de Octubre de 1983. A lo largo de sus últimos años, los bienes que procedían en gran parte de mi abuela Roser Sans y mi tía Elisa Balagué, fueron a parar poco a poco a manos de los Puig en un proceso continuado y sin pausa. La finca de mi abuela de 1000 m2 de la calle Art, 98 en Barcelona fue troceada en varias fechas y escrituras y de ahí Josep Maria Puig Planas, Antonio Puig Planas y Mariano Puig Planas edificaron dos bloques de 26 pisos con la correspondiente ganancia patrimonial.
Posteriormente la empresa de mi tío, Industrias Metálicas Castelló, también fue a parar a manos de los Puig con el correspondiente aumento patrimonial después de varias operaciones especulativas iniciadas por Marc Puig Guasch en el año 1993 cuando fusiona esta empresa, después del fallecimiento de mi tío, con Eyelet Ibérica S.A. surgiendo la nueva firma Lir Española de Packaging S.L. Al final los Puig venden la empresa de mi tío a Alcan Rio Tinto que acaba cerrando en el año 2010 después de una mala gestión.
Exactamente igual sucedió con la empresa de mis tíos, Monturas y Fornituras S.A. una empresa durante muchos años viable y al final mis tíos la perdieron a manos de los Puig que la vendieron también a la firma francesa Pechiney, propiedad así mismo de Alcan Rio Tinto. El aumento patrimonial de los Puig en todas estas operaciones especulativas a costa de mi familia fue considerable y de esta forma pudieron consolidar sus otros negocios como el de las colonias y perfumes.
Y como fue que mi tío perdió todo este patrimonio a manos de los Puig?, pues sencillamente con un modesto vitalicio que lo apartó de sus negocios cuando ya no era útil para ellos. El que fue fundador de su propia empresa Industrias Metálicas Castelló y dio trabajo en ella a Josep Mª Puig Planas, el que fue creador e impulsor de Flamagas, el que fue fundador de Monturas y Fornituras junto con mi tía Elisa, mi tío, al final perdió todo esta patrimonio a manos de los Puig como decía, por un mero vitalicio.
Curiosamente en el libro publicado por los Puig en su pretendido y falso centenario, en la página 12 del mismo se nombra a mi tío Paco Castelló en 4 escuetas líneas, eso si, explicando que " Industrias Metálicas Castelló tiene su propia historia por narrar ", cosa que evidentemente los Puig no hacen en todo el resto del libro y por razones obvias. Adicionalmente en la página 44 del mismo libro, los Puig vuelven a mentir al escribir que Antonio Puig Castelló fundó la empresa de mi tío Industrias Metálicas Castello, hecho totalmente falso ya que fue creada únicamente por mi tío y años antes de la guerra civil de 1936, tal como lo demuestra el documento del 31, 10, 1957 que anteriormente mostré, por el que mi tío como propietario único de Industrias Metálicas Castelló decide transformar su empresa en una S.A. .
FALLECIMIENTO DE MI PADRE JOAN GALLEMÍ CLAVERIA
Mi padre Joan Gallemí Claveria dos años antes de su fallecimiento
La defunción de mi padre en el año 1961 a una edad relativamente temprana dejó viuda a mi madre Maria Balagué en una delicada situación familiar y económica, ya que mi padre que fue el Apoderado de Industrias Metálicas Castelló S.A. y más tarde de Monturas y Fornituras S.A. propiedad al final de los Puig, como en otros casos, no fue dado de alta nunca por ellos, encontrándose mi madre totalmente desamparada al no contar con ninguna pensión de viudedad. Después de varias solicitudes por mi parte a los Puig, al final conseguí que abonasen a mi madre en los últimos años de su vida un misero subsidio que no llegaba al salario mínimo ni al Sovi. Precisamente mi padre que ayudo a los Puig y yo misma en la compra de su edifico central de Travesera de Gracia en Barcelona mediante un préstamo todavía no devuelto y en otras formas, acabó sus días sin estar dado de alta por los Puig y teniendo que reclamarles un ingreso que en ningún caso llegó a ser el que le hubiese correspondido en caso de que los Puig lo hubiesen dado de alta en la Seguridad Social. Increible pero fue así.
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